“Charlie Hebdo” estaba bajo amenaza desde el 2006

El atentando terrorista de este miércoles contra el semanario satírico “Charlie Hebdo” fue el acto más sangriento, sin embargo el semanario ya había padecido de otros ataques.

Recibió ataques verbales, fue víctima de un incendio, y amenazas telefónicas directas al director y sus colaboradores desde el 2006.

Nadie imaginó jamás que su redacción sería blanco de esta locura mortal, probable reacción a la última portada del semanario, que tuvo al pensador Michael Houellebecq, autor de la obra antiislámica “Sumisión”.

El fatal tiroteo contra la redacción de este medio emblemático de un estilo periodístico particular parece la sangrienta crónica anunciada de una larga historia de amenazas y atentados, que hoy pueden ser definidos como “menores”, a la luz de lo sucedido este 7 de enero.

Los terroristas sabían a qué hora se reunía la redacción y esa fue la elegida para atacarlos.

Antecedentes

El semanario fue fundado en 1969 y publicado hasta el año 1981 cuando su financiamiento por suscripción –ya que se negaba a recibir publicidad- resultó insuficiente, y Charlie Hebdo debió detenerse en la edición 580, según resume el diario Le Monde.

El año 1992 fue el de su relanzamiento, cuando un grupo de dibujantes, e incluso también algunos artistas, aportaron fondos para volver a ponerlo en la calle.

En su redacción trabajan alrededor de 20 dibujantes, entre ellos, el emblemático Wolinski, de enorme popularidad. En el atentado, murieron su director, Charb, y tres dibujantes: Cabu, Tignous y el citado Wolinski.

Además hay 30 redactores y colaboradores no permanentes. Aunque su fuerte es la ilustración, Charlie Hebdo publica también crónicas y hasta practica el periodismo de investigación, sobre una temática muy amplia, política y social, especialmente.

La línea editorial, según su propia definición, es de izquierda plural. Su tono provocativo y sarcástico, como suele suceder con este tipo de periodismo, les trajo más de una vez la furia de las autoridades.