Este miércoles salió el número especial del semanario Charlie Hebdo después del atentando terrorista que sufrió la semana pasada el equipo de periodistas, editorialistas y caricaturistas, en donde murieron 11 personas.
El primer tiraje de 700,000 ejemplares fueron lanzados y en minutos se agotaron de los quioscos de Paris y otras ciudades europeas. Han anunciado que habrá otros tirajes hasta los 5 millones.
“Este número especial subraya que sus lápices estarán siempre más afilados que las balas”
La misma ola de solidaridad que el domingo echó a la calle a casi cuatro millones de personas a favor de la libertad de expresión y contra el terrorismo se trasladó este miércoles a los puntos de venta de la revista satírica, que agotó sus primeros ejemplares recién salidos de la imprenta.
En algunos lugares como un conocido establecimiento cercano al Arco del Triunfo de la capital francesa, la venta se limitó a tres revistas por persona del número 1178 del semanario que a dos horas de ponerse a la venta se agotó.
El tiraje semanal del semanario anterior al ataque terroristas fue de 60,000. La portada de esta semana exhibe nuevamente a Mahoma.
La caricatura en portada de un Mahoma lloroso, que se une con el cartel de “Yo soy Charlie” al lema de solidaridad que ha unido a los franceses, no tuvo apenas tiempo de reposar en las estanterías de los quioscos.
Este número es, según dice el redactor jefe, Gérard Biard, en su editorial, el periódico que siempre han hecho, en compañía de quienes siempre lo hicieron.
Este número especial subraya también que sus lápices estarán siempre más afilados que las balas, y se pregunta qué será de él una vez cese toda la ola de solidaridad inédita.
El humor, no obstante, no esconde el dolor: “Ellos han muerto, pero nosotros vivimos -concluye El Rhazoui- y nos costará mucho, mucho tiempo, recoger los pedazos”.
