Con más de mil 400 casos en el mundo, la mayoría en China, Hong Kong declaró emergencia por el virus.
El presidente de China, Xi Jinping, decidió cancelar todas las celebraciones oficiales de Año Nuevo Lunar.
También se canceló la maratón Standard Chartered, programada para el 9 de febrero, en la que participarían cerca de 70,000 atletas.
Y se anunciaron restricciones a los contactos con China continental. Se interrumpirán los vuelos de entrada y salida y los viajes en tren de alta velocidad entre Hong Kong y Wuhan, ciudad china en la que se originó el brote.
En tanto, las escuelas que ahora están de vacaciones por el Año Nuevo Lunar, permanecerán cerradas hasta el 17 de febrero.
Xi sostuvo una reunión con la comisión política el sábado para ver medidas de combate el brote “acelerado”, informó la televisión estatal.