Después que el pasado miércoles el gobierno federal condicionara el diálogo con disidentes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) a su regreso a clases, y les fuera retenido el sueldo a los maestros oaxaqueños su primera quincena de junio, prometieron volver a las aulas el próximo miércoles 17 de junio.
Situados en el Monumento a la Revolución, en el DF, los sindicalistas de la Sección 22 comenzarán a regresar a sus centros de trabajo dejando sólo un “plantón representativo”, según un acuerdo de asamblea.
Afirmaron que no claudicarán en sus reclamos y amagaron con impulsar un boicot contra la aplicación del examen de evaluación docente, prevista para 20, 21 y 22 de junio.
Rubén Núñez, líder de la Sección 22, aseguró que el regreso a clases no significa reactivar el diálogo.
El receso en el paro laboral en los 13 mil 500 centros escolares de Oaxaca, a los que asisten un millón 500 mil alumnos de educación básica, media superior y superior, es un acuerdo de los 37 sectores representados en la asamblea estatal, donde también participa el Comité Ejecutivo Seccional, encabezado por el secretario general de la Sección 22, Rubén Núñez Gínez.
El paro, que inició el 1 de junio, fue para sabotear el proceso electoral del 7 de junio y demandar la abrogación de la Reforma Educativa. A pesar de hechos vandálicos en instalaciones del INE antes y durante la jornada comicial, el proceso se efectuó al instalarse 95% de casillas.
