Cometa ISON más cerca del Sol y la Tierra

El cometa ISON, descubierto en septiembre de 2012 por dos astrónomos rusos, tendrá su perihelio (punto de mayor cercanía al Sol) el próximo jueves 28 de noviembre, y su mayor cercanía a la Tierra se producirá el 26 de diciembre. En ese lapso, las posibilidades de ver algo espectacular en el cielo dependerán básicamente del estado físico que conserve el cometa, según declaró en conferencia telefónica el astrónomo estadounidense Adam Mckay.

McKay, quien estudió astronomía en Massachusetts y un posgrado en Nuevo México, forma parte del elenco de El cometa del siglo, programa que transmitirá el canal Nat Geo, hoy a las 21 horas.

Al científico le resulta apasionante el estudio de un fenómeno estelar que, durante siglos, fue visto por el ser humano como un mal presagio. Apenas en el siglo XVIII se supo que los cometas orbitan el Sol, igual que los planetas. En 1705, Edmund Halley dedujo que el cometa que ahora lleva su nombre retorna cada 76 años, y que era el mismo que fue visto en Grecia en el año 466 antes de Cristo. En 1986 se realizó la primera observación de un cometa desde satélites espaciales, precisamente con el Halley, y hasta entonces fue posible saber la composición física de los cometas, sobre todo que tienen un núcleo de roca helada, cuyo desgaste por evaporación provoca la visión de la coma (aura) y la cauda (cola).

—¿Qué puede suceder respecto a la visibilidad de ISON en los próximos días?

—Realmente no estamos seguros. Conforme se acerca al Sol, obviamente existe un mayor calentamiento y eso aumenta la evaporación del hielo que contiene el cometa. Ese efecto puede continuar sin alteración, pero la pregunta sin respuesta es qué sucederá cuando esté más cerca, si permanecerá intacta su estructura o se fragmentará ante la fuerza gravitacional del Sol y las duras condiciones que experimentará en ese momento.

—¿Qué debe hacer la gente común para ver el cometa?

El cometa se está moviendo rápidamente hacia el Sol, así que el mejor momento para ver es justo antes del amanecer, tal vez media hora antes, mirando hacia el este.

—¿Podrá verse en todo el continente americano?

Desafortunadamente, no. La visibilidad será mucho mejor en el hemisferio norte (México incluido), y muy difícil en el hemisferio sur. Incluso, si el ISON sobrevive a su paso cercano al Sol, se disparará más hacia el norte.