La dependencia a las nuevas tecnologías existe; y aquéllos que la padecen son los que no puede dejar de consultar su smartphone cada minuto, revisar su twitter, facebook o demás redes sociales.
Actualmente se están desarrollando diversas terapias para combatirla, desde el empapelado anti-wifi hasta las vacaciones 100 por ciento “off – line”.
La dependencia es tanta que se esta conectado en la cama, en los restaurantes, en el baño, en el cine; por ejemplo en Estados Unidos cerca de la mitad de los los adultos tienen un smartphone y más de un tercio una tableta digital.
Científicos franceses han creado un empapelado de pared especial que bloquea las ondas wifi y la firma Ahlstrom se plantea comercializarlo el año que viene.
El hotel Westin de Dublín planea la “desintoxicación digital” y permite a sus clientes dejar sus celulares y tabletas en la recepción y les propone a cambio un “equipo de desintoxicación” que incluye un juego de mesa tradicional y material para plantar un árbol por un precio de 175 euros por noche.
Otra iniciativa empresarial antidependencia es organizar retiros sin Internet en lugares aislados de Estados Unidos o en países lejanos, como Camboya.
En el mundo del trabajo, las empresas toman precauciones para que sus empleados no pasen las 24 horas del día conectados a la red.
Por ejemplo, el fabricante de automóviles alemán Volkswagen decidió no enviar mails a su personal entre las 18:15 y 07:00 de la mañana.
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