Científicos de Inglaterra descubrieron cómo trabaja el cerebro cuando el ser humano escucha bromas, o juegos de palabras chistosas.
Los investigadores de la unidad de cognición y ciencias cerebrales del Consejo de Investigación Médica británico, buscaron la relación entre el estímulo risible de una broma y el comportamiento del cerebro. Para ello, escogieron a un grupo de 12 voluntarios sanos para realizar las pruebas deseadas.
Este experimento va más allá de lo anecdótico, resulta que el verdadero objetivo es saber si las personas en estado vegetativo todavía son conscientes, y si reaccionan ante estímulos de este tipo.
Para el estudio, los científicos utilizaron resonancias magnéticas funcionales (RMF) y descubrieron que ante estos estímulos las zonas cerebrales de recompensa se activan de forma considerable. Además, “Hallamos un patrón característico de la actividad cerebral cuando las bromas utilizadas eran juegos de palabras”, señaló Matt Davis, codirector de la investigación.
Lo que implica este estudio para las familias de las personas con estas condiciones es de gran relevancia, pues así tendrían la esperanza de comunicarse con ellos, aunque no respondan. Al respecto Davis dijo: “Mapear la forma en que el cerebro procesa las bromas y las frases muestra cómo el lenguaje contribuye al placer de escuchar una broma. Podemos usar esto como indicio para comprender de qué manera las personas que no pueden comunicarse normalmente,reaccionan a las bromas”.
Todavía falta hacer pruebas con individuos que presenten estas condiciones, sin embargo, el primer paso es un gran avance.
Fuente: La Jornada