Antes de que termine este año, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) completará la separación contable y financiera de sus funciones de generación, transmisión, distribución y comercialización.
Enrique Ochoa Reza, titular de la CFE señaló que la compañía tendrá una nueva organización que le permitirá evolucionar.
“Habrá una nueva organización industrial que le permitirá a la CFE pasar de ser una empresa de electricidad a una empresa de energía, es decir, que también pueda comercializar combustibles”, señaló.
Esto se hará durante el segundo semestre del 2015, con lo que concluirá la transición administrativa que le convertirá en una empresa productiva del Estado en toda la extensión de la palabra.
Esta semana ya puso en marcha su filial internacional de comercialización de combustibles, que era el otro pendiente en ese camino.
Ochoa Reza aseguró que el año pasado, CFE facturó 333 mil 397 millones de pesos, lo que la convierte en una de las primeras cinco empresas más grandes del país.
La compañía ha venido cumpliendo con el calendario de cambios planteado por la reforma energética, en el que ya se cuenta la creación de un consejo de administración que incluye consejeros independientes, como el de cualquier empresa ambientada en un entorno competitivo y un gobierno corporativo hecho a las reglas del mercado. Ése es el mantra de la nueva empresa productiva del Estado.
Fuente. El Economista