(Notimex).- El consejero del Interior de la Generalitat de Cataluña, Joaquim Forn, confirmó hoy que Younes Abouyaaqoub es el conductor de la camioneta del atropello múltiple del pasado jueves 17 en Las Ramblas de Barcelona, que causó la muerte a 13 personas.
En entrevista con la emisora Catalunya Radio, explicó que se emitió una orden internacional de búsqueda y se ignora si permanece en España o salió del país, por lo que se han ampliado las pesquisas en coordinación con policías europeas.
El presunto terrorista utilizó una camioneta que condujo a gran velocidad por el eje peatonal de Las Ramblas de Barcelona (zona de gran afluencia turística) y tras arrollar a los paseantes por más de 600 metros, abandonó el vehículo y huyó a pie.
Forn recalcó que el cadáver que apareció el jueves en un vehículo en Sant Just Desvern, en las afueras de Barcelona, tiene relación con los atentados de Barcelona y Cambrils.
El relato que baraja la policía es que Abouyaaqoub bajó de la camioneta una vez cometido el atropello múltiple en Las Ramblas, se puso unos lentes oscuros, huyó por el Mercado de la Boquería y en pocos minutos caminó hasta el campus universitario que está en el centro de la ciudad.
En ese lugar habría asaltado al propietario del vehículo, un Ford Focus, al que acuchilló y colocó en el asiento trasero para huir del centro donde ya se comenzaba a instalar el cordón de seguridad.
Al circular por avenida Diagonal un control policial lo intenta parar por no respetar el límite de velocidad y atropella a una agente y su compañero dispara al coche sin lograr detenerlo.
Tras iniciarse su persecución, el vehículo es encontrado abandonado en Sant Just Desvern con el cadáver del propietario, Pablo Pérez, asesinado con arma blanca.
En tanto, la policía centra otra parte de las investigaciones de los atentados en el imán de la mezquita de Ripoll (provincia catalana de Gerona) Abdelkabi Es Satty, que se cree podría ser el autor intelectual de los atentados que ya suman 15 muertos (13 en Barcelona, una en Cambrils y Pérez).
Los equipos forenses tratan de identificar unos restos mortales encontrados el fin de semana en la casa de Alcanar (provincia de Tarragona) que el jueves de madrugada explotó al estarse manejando explosivos y gas.
La policía catalana considera que la célula yihadista preparaba en ese lugar un atentado de mayor dimensión, pero que al explotar el material que almacenaban decidieron optar por los atropellos en Barcelona y Cambrils.