De acuerdo con la cardióloga Amo Pollak, las personas con presión alta o antecedentes familiares con esta enfermedad, deben disminuir o eliminar las cantidades de sodio que consumen para evitar complicaciones en su estado de salud.
Una de las recomendaciones que dio es reducir la cantidad de sal en la mesa, y en caso de comer fuera de casa pedir que los alimentos se preparan sin sal, pues aunque realza el sabor de la comida, es un factor de riesgo para infartos cardíacos, accidentes cerebro-vasculares, insuficiencia cardiaca y demencia.
Para acostumbrarnos a una dieta baja en sal, puedes incorporar más hierbas y especias para acentuar el sabor de la comida.
A pesar de que el sodio es un mineral necesario para el cuerpo, ya que mantiene el balance de líquidos, ayuda a la actividad muscular, la digestión y a transmitir impulsos nerviosos, sólo se requiere una mínima cantidad que se puede encontrar de manera natural en los alimentos.