El martes fue un nuevo día agitado para el pueblo sirio, en donde miles de habitantes de la ciudad de Maarat al-Numaan tuvieron que huir de las tropas de Bashar al-Assad, que iniciaron una ofensiva.
Antes del ataque, las fuerzas del gobierno se habían situado en una zona petrolera al Este del país, desplegando tanques y vehículos blindados en la ciudad de Deir al-Zor y en Albu Kamal, localidades en la frontera de Iraq, justo una semana después de que ambas presentaran casos de protestas.
En la ciudad de Maarat al-Numaan, punto de conexión entre Damasco y Aleppo, se podía escuchar: “¡El ejército está llegando, busquen refugio para ustedes y sus familias!”, desde los altavoces de las mezquitas.
Cerca de 9,000 sirios ya han escapado rumbo a Turquía, país que ya ha hecho pública la apertura de su frontera para los refugiados sirios.
Con el avance de las tropas militares, los habitantes buscaron a toda costa un escondite, luego de continuar las manifestaciones en contra del presidente cuya familia lleva 41 años en el poder.
“Nos reunimos hoy con el gobernador (provincial) y él nos aseguró que el Ejército entrará sólo para arrestar a 360 personas que tiene en una lista. La gente de Maarat, sin embargo, está escéptica”, comentó una fuente local.
Debido a su contexto, Siria prohibió el acceso a la mayoría de los periodistas extranjeros, por lo que los datos y la situación actual en su territorio no se puede corroborar de manera imediata.
Fuente: CNN
Foto: EFE
