Lindsay Lohan fue expulsada del centro de rehabilitación Betty Ford en el que se encontraba internada.
La dirección de la clínica calificó a la actriz como una “mala influencia para sus compañeros”.
“Se saltaba las terapias de grupo, hacía la vida imposible a los demás, y era totalmente perjudicial para la gente que la rodea” expresaron unos trabajadores del centro.
La actriz ha cumplido tan sólo 40 de los 90 días que el juez le impuso por conducir ebria al volante, estrellar su Porsche y además, mentir a la policía.
Lohan fue vista recientemente en Cliffside Malibu fumando con un grupo de amigos.
