De pulques olvidados y cervezas incipientes en Hidalgo

Gabriel Gutiérrez García

De manera reciente fuimos invitados a través del Consejo de Promoción Turística y el Gobierno del Estado de Hidalgo a un viaje de familiarización por algunos puntos específicos de Hidalgo. Visitamos Mundo Fútbol, el pisal (mural en el piso) de Byron Gálvez Avilés dentro del complejo del parque Ben Gurion; el reloj Monumental; el Museo de la Fotografía en Pachuca, Hidalgo, y otros muchos atractivos de ese estado.

Una de las rutas más interesantes es sin duda la de las Ex Haciendas Pulqueras que hay en el estado. La industria y economía que generó esa bebida fue de las más importantes en México, pero solo visitando las Ex Haciendas se puede entender la cantidad de dinero que la producción de pulque generó. Por desgracia y por múltiples factores el pulque cayó en desuso, llegaron otras bebidas y la sinrazón y el poco aprecio por el maguey hicieron que la bebida de los Dioses prehispánicos desapareciera, sin exagerar, del mapa. Pocas, muy pocas, son las casas productoras de pulque en Hidalgo y pocos los actuales dueños de aquellos emporios que tienen conciencia de lo que representó.

Tal parece que no hay idea de dónde salieron todas esas habitaciones y construcciones inmensas que dieron fama a Hidalgo y a México. Los tinacales no existen y si existen son los lugares más abandonados de las construcciones. El Pulque, y me van a disculpar la expresión, vale madres. Al menos esa es mi percepción.

En la Ex Hacienda de San Juan Pueblilla en Zempoala, Hidalgo, una de las más pequeñas y mejor restauradas e intervenidas hay un caso particular que hay que destacar. En sus instalaciones existe una micro cervecería denominada Cervecería Hacienda que produce en el antiguo tinacal dónde se elaboraba el pulque cerveza artesanal y que da empleo a varias personas. Es de alguna manera y sin perder la dimensión, una forma de reinterpretar lo que fue la Hacienda produciendo una bebida que genera recursos para preservar la construcción y empleo a personas del poblado aledaño.

Obvio, lo ideal, lo más romántico quizás, sería que se siguiera produciendo pulque pero habría que insistir y es tema de otra columna que por múltiples factores esta situación, al menos hoy, no es tan técnicamente viable y sin embargo es de aplaudir que los actuales propietarios de la micro-cervecería hayan decidido emprender un negocio artesanal. Elaboran 3 tipos de cerveza cerveza Hidalgo estilo stout, Catrina estilo red ale y la Jaguar estilo pale ale, cada una con características de cuerpo, sabor y aroma distintos.

Por el momento la producción es muy pequeña y la distribución es limitada; sin embargo, a través de sus redes sociales se puede conseguir y ya hay algunos chefs como Aquiles Chávez que las tienen en sus restaurantes. La Ex Hacienda de San Juan Pueblilla también tiene visitas guiadas y en ella se pueden realizar fiestas. Sin duda, una buena oportunidad para conocer el pasado pulquero y el presente de un pedacito del estado de Hidalgo.