A pesar de que Delfina Gómez Álvarez se ha pronunciado contra la corrupción, una investigación detectó que la candidata a la gubernatura del Estado de México por parte de Morena abusó de su cargo cuando de alcalde de Texcoco, desviando cientos de miles de pesos para su beneficio personal.
Una solicitud de información vía transparencia al Órgano Superior de Fiscalización del Estado de México, sobre información contable del ayuntamiento de Texcoco en el periodo 2013-2015, reveló que la entonces presidenta municipal realizó dos pagos a su propio beneficio. El primero el 16 de enero del 2015 de 217,279.15 pesos brutos como “gratificación extraordinaria” y el segundo el 31 de marzo, se autorizó 220,191.43 brutos como “finiquito laboral”. Ambos pagos suman 437,470.58 pesos.
Los documentos muestran que la propia Gómez, autoriza con su firma los cheques y las pólizas mediante los cuales recibió 300,000 pesos netos, provenientes de las arcas municipales, hecho que según el artículo 42 de la Ley de Responsabilidades de los Servidores públicos, es ilegal, pues “está prohibido que un servidor público cause daño a la hacienda pública municipal por el manejo irregular de fondos municipales o por irregularidades en el ejercicio o pago de recursos presupuestales del municipio”.
En los documentos también aparece la firma del entonces tesorero municipal, Alberto Martínez Miranda, hermano del actual alcalde, Higinio Martínez, quien es señalado como asesor principal de la candidata de Morena al gobierno mexiquense.
Por otra parte, el Código Administrativo del Estado de México, en su artículo 289, señala que “ningún servidor público podrá percibir remuneración que no haya sido aprobada por el ayuntamiento correspondiente ni compensación extraordinaria que no hay sido incluida en el presupuesto correspondiente” y que “ningún servidor público (incluso el presidente municipal) estará facultado para establecer percepciones, cualquiera que sea su denominación, de manera discrecional. Los bonos, estímulos, premios, gratificaciones o compensaciones adicionales a lo autorizado en el Presupuesto de Egresos no podrá ser superior a 10% del salario bruto mensual”.
En el caso de la entonces alcalde de Texoco, su sueldo base mensual integrado era de 93,669.41 pesos, es decir, su “gratificación extraordinaria” no podía ser superior a 9,367 pesos. Por lo que la ahora candidata a gobernadora del Estado de México ha incurrido en una responsabilidad administrativa cuya sanción corresponderá imponer a la Legislatura mexiquense, pues aún no prescriben las conductas señaladas, e incluso habría responsabilidad penal que no ha prescrito.
Delfina Gómez podría recibir una pena de seis a 12 años de prisión y de hasta 300 días de multa, ya que se trata de un daño patrimonial superior a los 437,000 pesos.
Con información de El Economista
