Por medio de un estudio reciente, publicado por la revista científica Science, se descubrió que parte del agua existente ahora en el sistema solar es anterior incluso a la formación del Sol,
Este hallazgo abre la posibilidad concreta de que haya también vida en los mismos exoplanetas que orbitan.
Es sabido en este punto que Durante años, los investigadores han tratado de determinar si el agua que se encuentra en el sistema solar procede de la nebulosa molecular que rodeaba al astro rey.
Por tanto, era de la misma de la que nacieron los planetas, o si fue creada antes de que una nube fría de gas formara el Sol.
La investigación, dirigida por Lauren Cleeves, de la Universidad de Míchigan, ha recreado un modelo informático que analiza las condiciones químicas oportunas.
En concreto de las que entre las moléculas de agua formadas hace 4,600 millones de años en el sistema solar.
Los expertos se han centrado en el estudio del deuterio, un isótopo estable del hidrógeno presente en el agua, en meteoritos y cometas también.
Por su parte, el equipo determinó que los procesos químicos dentro del sistema solar primitivo no pueden ser causantes de los índices de deuterio.
En concreto de los hallados actualmente en el agua encontrada en cometas, lunas y océanos de ese sistema en particular.
Es por tanto, en consecuencia, que una parte notable del agua del sistema solar no pudo formarse después que el Sol; por tanto, una cantidad de hielo interestelar sobrevivió a la creación de ese sistema.
Eso significa que, si otros sistemas planetarios en la galaxia se formaron de la misma manera que la nuestra, esos sistemas habrían tenido acceso a la misma cantidad de agua a la que accedió el sistema solar.
Los investigadores apuntan que “la disponibilidad de agua durante el proceso de formación de planetas abre una perspectiva prometedora sobre la prevalencia de vida en toda la galaxia”.
En este sentido, hasta ahora, el satélite Kepler de la NASA ha detectado 1,000 planetas extrasolares confirmados.
