Hoy miércoles, 10 de octubre, se celebra el Día Mundial de la Salud Mental. Este año se centra en la depresión por su alta incidencia, una enfermedad que afecta a 350 millones de personas en todo el mundo.
El lema del año 2012 es: “La depresión, una crisis mundial”.
La depresión afecta a más de 350 millones de personas de todas las edades y en todas las comunidades, y contribuye de modo significativo a la carga mundial de morbilidad.
Actualmente se dispone de tratamientos eficaces, pero el acceso a ellos es problemático en la mayoría de los países, y en algunos solo lo reciben menos del 10 por ciento de las personas que lo padecen.
Datos de la OMS (Organización Mundial de la Salud) indica que el número de niños y adolescentes, desde 12 a 25 años, que padecen depresión es tan alto como en los adultos, el problema es que no se detecta porque no hay conciencia de su real incidencia.
“La depresión afecta más a mujeres que a hombres. La depresión postparto es bastante común. De hecho, afecta al 10 por ciento de todas las madres recientes en el mundo desarrollado y al 20 por ciento en los países en desarrollo”.
La depresión es el resultado de interacciones complejas entre factores sociales, psicológicos y biológicos. Hay relaciones entre la depresión y la salud física; así, por ejemplo, las enfermedades cardiovasculares pueden producir depresión y viceversa.
Es una enfermedad frecuente, se debe ayudar a las personas que la padecen a aceptarla y tratarla.
