Dimes y diretes en la crisis del PAN

A pesar de que su papel como dirigente no parece haberse debilitado al refrendar la gubernatura en Baja California, fortaleza panista desde hace 24 años y Puebla Capital, dicen las voces críticas al interior, que la victoria fue subsidiada por las alianzas con el PRD, asunto que en el caso de B.C. tiene un gran sentido por el estrecho margen con el que ganaron; pero las alianzas nos gusten o no, estemos de acuerdo o en contra, son legales y válidas.

Son varios los factores que tienen hundido al PAN en su actual crisis, comentábamos apenas el 5 de Julio: “la debacle de Acción Nacional inició el día que Fox ganó las elecciones, nunca pudieron cambiar su chip interno, de oposición a gobierno y cayeron en la trampa más grande que tiene El Poder, la corrupción”. Sin embargo, hay muchos factores adicionales que nos permiten entender el proceso y otros complementarios ahora que no tienen “El Poder”.

Para empezar lo que se le critica a Madero al interior del partido, es el asunto ideológico y la falta de tareas de verdadera oposición y para lograr eso se necesita, según ellos, un cambio de dirigente y de dirigencia, todo en opinión de los grupos opositores, y aclaro, no necesariamente son solo “corderistas”.

También le atribuyen que no tuvieron, en ningún momento, listo al partido para participar en la elección presidencial del año pasado, en la que no sólo perdieron, se fueron hasta el tercer lugar, yo me pregunto si esto sólo era responsabilidad de Madero, máxime que Felipe Calderón ostentaba la Presidencia.

Critican la forma en que manejó la sustitución de Ernesto Cordero como coordinador de los senadores y por quién lo sustituyó, a la vista de muchos, él, cómo líder nacional, y estoy de acuerdo, tenía que buscar la conciliación a toda costa, no decapitar a su adversario.

Hay otro tema fundamental que es la relación del PAN con el gobierno, la forma en que Madero ha participado en el Pacto por México, su método, su estrategia y muchas veces, a sus dichos, su silencio.

Yo en lo personal, más bien la veo como una grave crisis basada ya, en la “subdivisión” de los grupos de interés que predominaban en el partido, si bien es cierto que en todos los partidos hay grupos o corrientes, el PAN no nos tenía acostumbrados a esto, y menos en esta magnitud, tanto es así, que hace justo un mes Guadalupe Acosta Naranjo les dijo: “A mis amigos del PAN les recuerdo; que en el PRD tenemos derechos de autor en eso del manejo de conflictos internos. Di NO a la piratería!”.

Adicionalmente, y tal vez el mayor detonante, es que al salir del poder, se pierden la mayoría de las posiciones oficiales, sólo quedan las posiciones políticas y partidarias, obviamente y a todas luces, no les alcanzan, por lo que la división se recrudece y siguen generando candidaturas ilógicas o peor aún, vendiendo algunas de ellas, lo que definitivamente les lleva a que haya una clara ausencia de comunicación del ciudadano hacia el ciudadano, y ese, era el producto estrella del PAN.

A mí lo que me preocupa más, es que este cuestionamiento con relación al Pacto por México, permanezca vigente dentro del PAN, esté o no Madero al frente, participar en el pacto es participar en las reformas que necesita México, y eso al PAN de antaño, a pesar de las diferencias ideológicas, tengo que reconocer, era lo que le importaba.

Lo he comentado en varias ocasiones, el Pacto le conviene a México, y es la forma más racional de sacar adelante las Reformas, ya basta de chantajes, dimes y diretes, hay que hacer oídos sordos a las voces irresponsables, que hay muchas asignaturas aún pendientes y nos gustaría que las hicieran juntos.

En lo personal no creo que Gustavo Madero busque la reelección, ya lo dijo, él quiere salir como Greta Garbo, entre aplausos, pero ¿de quién?

Lic. Rafael Zaga @razagave