Novak Djokovic le ganó al francés Jo-Wilfried Tsonga el partido de semifinales, para así pasar a la siguiente ronda, donde disputará la final con el ganador del partido de Nadal contra Murray.
Lo de hoy tuvo algo mágico, Djokovic no nada más se enfrentaba con un adversario que había regresado de las cenizas para derrotar a Roger Federer después de ir 2 sets abajo, sino que además, la victoria le daba automáticamente el puesto número 1 en el ranking mundial.
Novak Djokovic ganó el partido con parciales de 7-6, 6-2, 6-7 y 6-3, en un poco más de 3 horas, para así adjudicarse el primer puesto en la cima, que no pertenecía desde 2004 a alguien que no fuera Federer o Nadal.
El partido fue complicado para el serbio, quien había demostrado en partidos anteriores la contundencia de su actual nivel tenístico. Prueba de esto es que sólo ha perdido una vez en este año. Sin embargo, el francés lo enfrentó como todo un malabarista. Se aventaba al césped para alcanzar pelotas, ganaba puntos insospechados, dominaba en el saque; pero todo esto fue inútil para quitarle a Djokovic lo más sagrado: el punto más alto en el ranking del tenis.
El partido fue reñido, pero Tsonga, número 19 en la cima, no tenía una estrategia planeada, metía golpes increíbles, pero sin una técnica depurada o un idea de lo que quería en la cancha. Al final, aunque el primer set se fue a tie break, que ganó Djokovic, y el tercero, también en desempate, que ganó Tsonga, no fue suficiente para derrotar al ahora nuevo número 1 del mundo.
Fuente: El País
Foto: Qué.es