Al momento en que una mujer de color fue acusada de robo en la tienda de Victoria´s Secret, en Oxford, Alabama, la gerente decidió echar a otras dos clientas negras que estaban ahí, pero que ni venían con o conocían a quien había robado.
Una de estas mujeres era Kimberly Houzah, de 27 años, a quien sacaron de ahí sin darle ninguna explicación: no la acusaron de robo, ni tampoco registraron su bolso, pero le pidieron que saliera de la tienda sin darle una razón.
Fue tal la sorpresa y la indignación de Houzah, que tomó un video en directo en Facebook para atestiguar lo que estaba ocurriendo: estaba siendo víctima de un acto racista.
En el video se observa que la gerente también se acerca a otra cliente de color, que tampoco estaba cometiendo ningún delito, para pedirle que se retire de la tienda. Del mismo modo, los guardias del lugar se acercan, como si necesitaran sacarlas a la fuerza.
Sin prueba alguna, las dos mujeres fueron sacadas de la tienda, diciéndoles la gerente: “sólo necesito que se vayan”. Fueron a las únicas que sacaron de ahí y a quienes acusaron sin ninguna evidencia, ya que los clientes caucásicos pudieron quedarse ahí comprando.
Victoria´s Secret presentó un comunicado, en el que exponía que: “Lo que pasó en nuestra tienda no debería haber ocurrido y no representa quienes somos ni lo que representamos. El empleado de la tienda involucrado en este asunto ya no trabaja en la empresa. Todos los clientes de Victoria´s Secret, independientemente de su raza, han de ser tratados con dignidad y respeto en todo momento”.
Sin embargo, Houzah regresó después a la tienda, con un grupo de seguidores, para demostrar su descontento. Los empleados no tuvieron más remedio que disculparse por lo ocurrido.
Al respecto, Houzah manifestó:
“Estoy un poco mejor hoy. No puedo cambiar quien soy. Soy una mujer afroamericana y sólo quiero que me traten como a todo el mundo”.
Mira el video:
