Una nueva amenaza para la salud ha comenzado a aparecer entre los jóvenes que viven obsesionados conbajar de peso y que son fanáticos de consumir bebidas alcohólicas.
Se trata de la “drunkorexia”, un nuevo trastorno alimenticio que han comenzado a desarrollar decenas de chicos en el mundo que deciden no ingerir alimentos para que su consumo de bebidas embriagantes no les reditúe en aumento de peso.
Según explicó el doctor Adelardo Caballero a la agencia Efe, los jóvenes están buscando que un atracón de bebidas (5 o 6 tragos) no les represente un problema en su imagen.
“La tendencia a dejar de comer durante horas o apenas comer durante el día para compensar las calorías ingeridas con las bebidas se está extendiendo, sobre todo entre las chicas jóvenes“, detalla el especialista.
El especialista comenta que “drunkorexia” se ha convertido en un problema verdaderamente drástico entreadolescentes y jóvenes hasta los 25 años de edad, quienes en un afán de quedar bien con sus amigos desarrollan esta actividad.
“Las jóvenes se encuentran así ante una encrucijada y terminan por elegir no comer para poder ingerir la granaportación calórica de las bebidas alcohólicas sin que aumente lo que marca la báscula”, agrega Caballero.
Por su parte, Marta Ruiz, experta en nutrición, explicó que este trastorno suele estar ligado con más frecuencia a personas que padecen o han padecido problemas alimentarios tipo anorexia o bulimia nerviosa, con episodios de atracones, y en aquellas tendentes a sufrir depresiones y que, a su vez, temen engordar.
Ruiz detalla que el beber con el estomago vacío es muy peligroso, ya que los niveles de alcohol en la sangre se incrementan mucho más rápidamente, provocando excesivo daño para el hígado.
“Si a esto le sumamos un sistema inmunitario deficiente derivado de la malnutrición provocada por los periodos de ayunos prolongados y/o personas con el esófago y estómago dañados a consecuencia de la anorexia o bulimia, los efectos en el organismo pueden llegar a ser demoledores”, indica.
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