El 63 por ciento de la informalidad que existe en México se concentra en la economía de tan sólo 10 entidades del país, según datos del Instituto Nacional de Estadísticas y Geografía (INEGI), publicadas este jueves en El Economista.
El primer lugar lo encabeza el Estado de México con la mayor población que trabaja informalmente, con 13.6 por ciento; el segundo lo ocupa Veracruz con 7.2 por ciento, le sigue la Ciudad de México con 6.6 por ciento, Puebla con 6.5 por ciento, Jalisco 6.0 por ciento, Chiapas 5.2 por ciento, Michoacán 4.9 por ciento, Oaxaca 4.7 por ciento, Guanajuato 4.6 por ciento y Guerrero 3.9 por ciento.
Los 22 estados restantes concentran el 37 por ciento de la Población Económicamente Activa que vive de la informalidad.
De acuerdo con José Luis de la Cruz, Director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC), esto es consecuencia de una política económica poco exitosa, pues “la estrategia de desarrollo económico a nivel federal no está funcionando para tener una actividad empresarial exitosa, eso se refleja en el crecimiento de la informalidad”.
“Es una válvula de escape ante los errores de la política económica; lo que se tiene que buscar es una estrategia de desarrollo económico que sea más incluyente”, declaró el investigador.
Por su parte, Miguel Reyes, Coordinador del Observatorio de Salarios de la Universidad Iberoamericana de Puebla, acusó que la poca industrialización del país redunda en una escasa creación de empleos formales, y esto contribuye a la economía informal.
“Como no hay incentivos fiscales, como no hay una estrategia de inversión eficiente y eficaz, lo que se hizo es que se generó una reforma laboral que abarató los costos de despidos y contratación, pero eso no significó que se iba a contratar más trabajadores, ni que se iba a generar más empleo y, mucho menos, más prestaciones”.