El decálogo del emprendedor de acuerdo a Breaking Bad

Este domingo llega a su fin la afamada y exitosa serie televisiva Breaking Bad, millones de personas esperan por el gran desenlace del drama químico-criminal que emprendieranWalter White (Bryan Cranston) y Jesse Pinkman (Aaron Paul) en enero de 2008.

Más allá de la original construcción de la historia y personajes o de la alta tensión que Vince Gilligan ha sabido mantener a lo largo de cinco temporadas, Breaking Bad también ha construido moralejas para la cultura emprendedora.

1.- “Tú conoces el negocio y yo conozco la química” (Walter White).

Al verse en apuros económicos y ser diagnosticado con cáncer de pulmón, Mr. White o Heisenberg, como se hace llamar a su alter ego de posterior capo, decide comenzar una actividad que le brindará los dividendos necesarios para proveer a su familia de cara al desolador futuro.

Cuando se topa con un dealer que en años anteriores fuera su estudiante de química (Jesse Pinkman), Walter ve claro el rumbo de la empresa a tomar. “Tú conoces el negocio y yo conozco la química” es lo que le dice White a Pinkman. Esto, en plano general se traduce en el lenguaje emprendedor como una asociación con la gente que tiene los talentos o cualidades que uno mismo sabe que no posee.

2.- “La familia es todo” (Héctor Salamanca).

Los métodos de uno de los villanos favoritos de Breaking Bad son rudos y hasta cierto punto crueles, sin embargo con esta frase nos hace ver la importancia del núcleo familiar dentro o fuera de la empresa. Si no hay unión y confianza dentro del negocio es difícil prosperar. La empresa es importante, sí, pero las personas que la componen lo son más aún, y como bien dicen “la unión hace la fuerza”.

3.- “Planes. Necesitas planes” (Walter White).

Mr. White le dice en un capítulo a Jesse algo así como “estar todo el día tirado comiendo botana y viendo tv no suena como un plan. Necesitas planes”. Nadie construye castillos en el aire y una empresa exitosa no surge de la nada ni nace de la noche a la mañana. Toma tiempo, se necesitan planes y estrategias, no sólo ideas y buena suerte. Confeccionar un plan adecuado para la situación a la que nos enfrentamos, con los recursos que tenemos, siempre dará mejores resultados que ir trabajando sólo al paso o al día a día. Hay que pensar en grande y a futuro, sí, pero también hay que estudiar con detenimiento todas las caras de la moneda, los pros y los contras con los que nos vamos a encontrar.

4.- “Hemos terminado cuando yo diga que hemos terminado” (Walter White).

Determinación y control son con frecuencia dos conceptos que suelen asociarse de forma negativa en algunos casos, sin embargo, a la hora de emprender un negocio son de vital importancia. Las cabezas de grupo deben de poseer siempre el control de las situaciones, eventualidades y la actividad del día a día. Si se es flexible en dejar las cosas a la mitad, o dejar que los demás las pospongan para mañana, es muy probable que no se alcancen los objetivos trazados y por consecuencia no se obtengan los resultados y ganancias deseadas. Siempre ten en mente que cuando tú como jefe, líder o emprendedor digas “hasta aquí”, es que lo haces con conciencia plena de que no falta nada, que se puede cortar el flujo sin arriesgar de forma peligrosa los recursos o que con eso basta para continuar o retirarse, en su caso.

5.- “No cometer el error dos veces” (Gus Fring).

Versa el dicho popular que es de sabios cometer errores o que éstos nos ayudan a crecer. Cometer errores nunca es malo, sobre todo si de ellos aprendemos una valiosa lección, todo el mundo camina por ese sendero. Sin embargo, cometer el mismo error en más de una ocasión puede ser sinónimo de que algo más grande no anda bien, que hay que cambiar algún proceso o ajustar la manera en la que venimos haciendo las cosas. Si eres un buen emprendedor, seguro cometerás más errores en el futuro, no te alarmes.

6.- “¿Por qué tomaste estas decisiones?” (Gus Fring).

Más allá de su desastroso final o de su oscuro proceder, Gus Fring tenía empresas exitosas gracias al control y minucioso análisis de las cosas. Todos estos consejos están relacionados entre sí para tener un negocio exitoso y ningún consejo o pregunta es demasiado obvia, absurda o innecesaria. Arriesgarse y tomar decisiones es cosa común entre emprendedores con visión, pero preguntarse con posterioridad por qué hiciste esto y no lo otro, te ayudará siempre a tener un mapa más claro de las cosas. Aplica para situaciones adversas y exitosas. Nunca será malo preguntarte la razón de tus acciones dentro de la empresa.

7.- “A veces no está de más tener a alguien cuidando tu espalda” (Mike).

El camino hacia una empresa exitosa es difícil, pesado y muchas veces solitario. Sin embargo, y sobre todo cuando en la empresa existe más de un elemento a tomar en cuenta, debes considerar que no puedes hacerlo todo tú solo.

Siempre es bueno tener aliados, pero sobre todo personas que estén velando por las distintas áreas a las que tú no entras de forma total, ya sea por desconocimiento, falta de tiempo o porque tus prioridades te absorben. Delega responsabilidades en personas capaces y en las que puedas confiar, ya que la idea es que sea una empresa exitosa, sí, pero también integral y segura. Tener a alguien que vele por tus intereses  no sólo es aconsejable, sino necesario.

8.- “No más medidas a medias” (Mike).

Grandes problemas, grandes decisiones, no hay más. Si tienes una situación adversa de tamaño considerable, por ejemplo una pérdida de flujo por procedimientos necesarios, la solución que tomes debe ser acorde con el tamaño de la circunstancia, directa y firme. De nada sirve una simple llamada de atención si el problema te está haciendo perder mucho dinero o si estás sacrificando más recursos que los beneficios obtenidos por la inversión de éstos. Sé contundente y actúa rápido.