“El Gordo” revela vida de lujos y deroches de su compadre “El Chapo”

Miguel Ángel Martínez Martínez, no tan solo fue la mano derecha de Joaquín Guzmán, es su compadre, padrino de sus hijas. Ayer el también conocido como “El Gordo” o “El Tololoche”, soltó la lengua.

Ante el juzgado reveló los lujos y derroches de su compadre, cuando a principios de los 90 “dinero les caía del cielo”.

“Cada mes llegaban a la Ciudad de México dos o tres aeronaves cargadas con entre 8 millones y 10 millones de dólares cada una”, dijo.

Con esas sumas de dinero “El Chapo” no reparó en darse lujos, llevar una vida de excesos y opulencias, por algo llegó a ser considerado el hombre más rico del planeta por la revista Forbes.

Sus “compritas”

“El Gordo” relató que el capo adquirió casas en todas las playas y ranchos en todos los estados.

Se compró un yate llamado Chapito. Reveló que fue real el mítico zoológico en su rancho de Guadalajara

También viajó por el mundo: Europa, Brasil, Argentina, Japón, y Macao.

Parte de su fortuna la uso en procedimientos químicos y quirúrgicos para rejuvenecimiento.

En las fiestas navideñas regalaba coches de lujo a sus allegados, amistades y hasta sus vecinos en diferentes partes del mundo.

También ocupaba el dinero para arreglar calles en poblados de Jalisco, Colima y Nayarit.

“El Gordo” aseguró que el acusado pagó sobornos a la Policía para que le permitieran traficar drogas. Los que presuntamente aceptaron sobornos de Guzmán Loera, Martínez identificó a Guillermo González Calderoni, quien en ese entonces tenía a su cargo la oficina en Guadalajara de la Dirección Federal de Seguridad de la Procuraduría General.

Aseguró que entre 1987 y 1992 le dieron “mucho dinero” a González Calderoni, “dos o tres veces 10 millones de dólares (MDD) cada ocasión”.