¿Quién no era fanático de los Huevos Kinder en la infancia? De hecho, habemos algunos que los seguimos siendo, pero cuando éramos niños, con frecuencia consumíamos estos huevitos de chocolate y hacíamos berrinche a nuestros padres para que nos compraran la docena de Kinder Sorpresa.
Y vaya sorpresota fue la que se llevó un niño de cinco años de Irlanda del Norte, cuando estaba con su hermano tres años mayor que él, disfrutando de uno de estos deliciosos chocolates y abrieron la cajita amarilla para descubrir su nuevo juguete.
El problema fue que en vez de juguete, el huevito contenía un par de bolsas con polvos blancos y cristalinos en su interior.
¡¿Qué tal?! Muy a la Breaking Bad, donde Walter White, mejor conocido como Heisenberg, se dedicaba a crear la mejor metanfetamina… Sabemos que todos amamos esa serie, pero no nos desviemos del tema.
En efecto, el juguete sorpresa del Huevo Kinder era nada más y nada menos que metanfetaminas, noticia que confirmaron las autoridades luego de analizar el contenido del chocolate, y gracias a que el pequeño reaccionó muy bien y entregó inmediatamente el producto a su padre.
La empresa aún no ha declarado nada al respecto, pero autoridades locales ya se encuentran investigando cómo es que la pequeña bolsa llegó ahí, pues representa gran peligro para todos los niños de aquel país.