Heriberto murió a los 35 años de edad. Una vida corta, intensa y llena de sangre. A los 17 años de edad, el “doble Lazcano” como le llamaban sus vecinos en la infancia se enlistó en la infantería del ejército mexicano. Aprendió pronto, fue disciplinado y llegó a formar parte un cuerpo de élite.
Seis años después, en marzo 1998, solicitó su baja del ejército para unirse casi de inmediato a los Zetas, el recién creado brazo armado del Cartel del Golfo.
Algunas versiones indican que Heriberto Lazcano Lazcano formó parte del núcleo de 14 militares con los que se creó inicialmente a los Zetas. Se cree que era el único que seguía vivo o libre de ese grupo original.
Tras la captura de González Pizaña, en 2004, llegó el momento de Heriberto Lazcano de comandar a los Zetas.
De sus gustos o placeres se sabe poco, hay 5 que sus cercanos le sabían:
- Las mujeres rubias.
- Le gustaban las carreras de caballos.
- Solía salir de caza mayor; jabalí, venado, gamo, cabra montés. La realizaba en las reservas naturales de Coahuila y San Luis de Potosí.
- Era muy religioso, rezaba todos los días, hacia donativos a iglesias. Pagó la construcción de una capilla en Pachuca, donde vivió de adolescente. Allí también habría mandado a construir un mausoleo.
- Tenía un rancho con leones y tigres a los que solía arrojar a sus víctimas, sobre todo agentes federales.
Fuente: Agencias y BBC Mundo
