De repente apareció. Oportunamente la subsidiaria de la armadora de aviones Airbus, que avalaba el aeropuerto de Santa Lucía, entregó al presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, un estudio detallado de las bondades de construir nuevas pistas aéreas en esa
Posterior a este hecho, dentro Morena y fuera, se rumora que Airbus podría estar recibiendo, una compensación por su oportuna participación, se habla de un gran contrato en la próxima administración.
¿Cómo sería ese contrato?
Airbus podría renovar por diez años más, sin licitación de por medio al tratarse de un asunto de seguridad nacional, el proyecto Red Nacional de Radiocomunicación, conocida como Red IRIS. Se estima que el contrato tendría un valor de 12 mil millones de pesos.
El problema no es el monto, sino la tecnología Tetrapol que usa y no ofrece todas las capacidades que ofrece la de sus competidores: Motorola, Huawei, Harris, EFJohnson, Tait.
Trascendió que el futuro secretario de Comunicaciones y Transportes, Javier Jiménez Espriú, pudo negociar con NavBlue, por el estudio a favor de Santa Lucía.
Cierto o falso, hay sospechas de que el gran contrato sea un pago por el estudio “salva-vidas”.
Las dudas se despejarán cuando se renueve el contrato de Tetrapol a Airbus o, en caso contrario, se de oportunidad a la tecnología P25 con la que quieren competir las otras empresas.