El Pacto por México: ¿Cumplió su misión?

Desde el terremoto de 1985, o tal vez antes, las tragedias han sido ejemplo de como la sociedad mexicana une sus esfuerzos con una finalidad, y yo me pregunto:

¿Por qué tiene que ocurrir una tragedia para que nos unamos como mexicanos que somos, por el bien de todos, que no es suficiente, tan sólo una buena causa, para unir nuestras voces, actos y conciencias de manera coordinada, civilizada y racional para lograr el objetivo?

Hace un año, México tal vez no estaba en escombros, pero definitivamente necesitaba de la participación de todos para su reconstrucción, de un gobierno que se acercara a sus gobernados, los escuchara y los hiciera partícipes de los cambios y las reformas, tomando las decisiones pertinentes para el beneficio de la mayoría, de un grupo de legisladores responsables que defendieran a sus votantes pero que dialogaran y se pusieran de acuerdo entre ellos, sin embargo, la parte vital, la más importante, la que blindaría por completo al Pacto por México, era la participación ciudadana, desgraciadamente, este espacio nunca se abrió, seguimos sin aprender ciertas lecciones.

El Presidente Enrique Peña Nieto y las tres principales fuerzas políticas, PRI, PRD y PAN firmaron el Pacto por México, como una plataforma para la transformación de este país, a la vuelta de un año, la plataforma está ahí, el primer año de gobierno, ha sido el año de las grandes reformas, estructurales, profundas, en mayor o menor grado, dependiendo de la óptica con la que se vea, pero definitivamente grandes proyectos pueden surgir de ellas.

¿Podemos afirmar entonces que el Pacto cumplió su misión?

Sí, porque se rompió la parálisis legislativa que dieron lugar a todas las reformas y definitivamente no se hubiera podido sin el.

No, porque no aprendimos la lección y hoy, el Pacto, a pesar de ser la operación política más brillante de los últimos 25 años, está muerto.

Hay una tercera respuesta, la que nos dará la historia, podemos hacer todas las reformas necesarias para un país, pero la parte importante no son las reformas en sí, ni las leyes secundarias, ni si lo lograron de manera unánime, por mayoría o por un gran cabildeo o madruguete, la parte fundamental es si se traducen o no, en bienestar para un pueblo, que hoy, esta sediento y hambriento de mejores condiciones de vida, espero fervientemente que se convierta en un sí, al tiempo.

Por lo pronto, un servidor, que empecé a escribir y plantear un Pacto antes de que se diera la primera reunión, seguiré tratando de poner mi granito de arena, sigo creyendo que tenemos que participar para enriquecer la pluralidad de visiones y poder exigir resultados, votamos y elegimos representantes, pero eso no significa que ya no somos responsables de nuestro futuro.

Yo hago un llamado a la conciencia de los ciudadanos, a participar, aportando su granito de arena para que en el país disminuya el enfrentamiento y el encono, tenemos que fomentar la participación responsable en beneficio no de Peña Nieto, ni del PRI, PRD o PAN, de México, recuerda que tú y tu familia, están incluidos en ese selecto y orgulloso grupo de personas llamados mexicanos.

El verdadero Pacto por México, hoy, debe ser ciudadano, ciudadanos que se dediquen diariamente  #MoverVoluntades, buscando empoderar a personajes ejemplares sin importar su filiación política, existen, y aunque su ideología se tiña de uno u otro color, tienen vocación de servicio y amor por su pueblo.

Recuerdo a Barack Obama, que en su campaña a la presidencia en 2008 decía:

“La batalla será larga, pero no importan los obstáculos que se alcen en el camino, nada parará las voces de millones de personas que piden la oportunidad de un cambio”, en nuestro caso, daremos la batalla desde nuestra trinchera para que México crezca, se combata la pobreza y la desigualdad social, en resumen, se desarrolle y progrese, queremos Enlazar a México!

Lic. Rafael Zaga @razagave