El penal de Ciudad Juárez: corrupción, tráfico, prostitución y muerte

Ciudad Juárez ha sido enlistada como una de las ciudades más peligrosas del mundo con un registro de 3,097 muertes durante el 2010. Ha sido el campo de sangrientas batallas por el territorio entre los carteles de Juárez y de Sinaloa, y las pandillas callejeras que se han aliado a alguno de los bandos.

La tasa de asesinatos en Juárez, que cuenta con 1.3 millones  de habitantes y que hace frontera con El Paso, Texas, ha caído un 22% este año, según los reportes de la propia policía. Sin embargo, 1,314 personas fueron muertas en la ciudad desde enero hasta el 27 de julio de este año, en comparación con las 1,696 personas muertas en los primeros siete meses de 2010.

La Fiscalía General de Chihuahua informó en un comunicado que la principal línea de investigación por la masacre ocurrida ayer el Cereso de  Ciudad Juárez apunta al aniquilamiento de un grupo rival (Los Mexicles) a otro (Los Aztecas) dentro del mismo penal. Así mismo, la Fiscalía General también confirmó que en horas previas al asesinato de 17 reos, los internos realizaron una orgía, en la que participaron entre 30 y 40 mujeres, entre ellas cuatro menores de entre 15 y 17 años.

La “fiesta sexual” se llevó a cabo el domingo 24, un día antes de que un grupo de internos no identificado aún, dieron muerte a 17 reos vinculados a los grupos delictivos de La Línea y Los Aztecas que se encontraban recluidos en el área de detención provisional.

“Mayra”, una adolecente de 16 años cuyo testimonio fue dado a conocer por El Diario de Juárez, reconoció haber asistido a la orgía.

“Me invitaron y me ganó la tentación, quería saber qué pasaba ahí”, señaló la joven, una de las cuatro menores que estuvieron presentes en el penal esa noche.

El marido de una de las cuatro menores que asistieron a la “fiesta” tiene un amigo dentro del penal y fue éste quien invitó a su amigo y la esposa de éste a la reunión, mediante la que, se presume, se introdujeron las armas.

Relató además que durante su detención fue agredida física y verbalmente por los elementos de la Policía Municipal con la finalidad de que declarara ser integrante de la pandilla de Los Doble A (Artistas Asesinos), lo que ella negó.

Sin embargo, sí reconoció que llegó con sus amigas al Cereso alrededor de las 23:00 horas del domingo 24 y contó que luego de registrarse en la aduana del penal, se dirigieron hacia una de las habitaciones donde se celebraba la “fiesta”.

Las jóvenes confirmaron que se distribuyeron bebidas alcohólicas y que había más mujeres, entre ellas su amiga de 15 años, quien pasó la noche y parte de la tarde en el penal con un reo. También, relataron, asistieron custodios y sus jefes.

“Cuando me dijeron que era en el Cereso, la pensé, pero me ganó la curiosidad, quería saber qué pasaba ahí adentro”, intervino otra adolescente.

Fue precisamente el hallazgo de una de las cuatro menores en compañía de un custodio –minutos antes de la masacre en el penal– lo que permitió a las autoridades enterarse de la celebración ilegal en el área de Los Aztecas.