Producir químicos cuando alguien te gusta es un proceso natural; sobre todo cuando sales regularmente con una persona. Pero a veces no nos conviene caer perdidamente enamorados, ya sea porque no tienes tiempo, o porque no vale la pena.
Por ejemplo, alguien guapísimo y súper interesante, pero con adicciones. Sabes que no quieres terminar ahí, aunque es divertido estar con él, porque aparte siempre se divierten mucho.
¿Cómo haces que no ocupe tus pensamientos todo el día? Muy sencillo; saliendo con otras personas. En cuanto notes que sonríes como idiota cuando recibes un mensaje suyo, busca en tu agenda alguien con quién no has salido nunca y ten una primera cita, o vete de fiesta y que te presenten gente.
Así se equilibra el proceso químico, tu cuerpo no se acostumbra a producir endorfinas con una sola persona, o por lo menos no formarás recuerdos exclusivos en esa etapa de tu vida. Si no funciona, siempre que lo veas tendrás algo nuevo que platicarle. Pero ten en cuenta que para esto hay que ser sincero con uno mismo. Todo se vale cuando eres soltero; eso es lo más divertido.
