Bajo un fuerte equipo de seguridad, con todos los reflectores sobre de ella, la esposa de Joaquín el “Chapo” Guzmán, llegó a la corte con un atuendo digno de una celebridad de Hollywood: abrigo negro, pantalones ajustados, blusa de diseñador y un gran tacón.
Los fotógrafos siguieron todo el camino a la ex reina de belleza hasta la puerta de los juzgados. Retrataron cada aspecto ella. Coronel Aispuro sonriente, en momentos pensativa, no habló con nadie.
Ya en la corte, Coronel y su esposo no pudieron abrazarse o hablar, se vieron a lo lejos. El “Chapor” había pedido abrazarla “un ratito”, sin embargo el juez federal Brian Cogan considera que el Chapo puede escapar u ordenar ataques contra testigos que colaboran con el gobierno. Así que la petición de Emma fue denegada.
