Pese a que el gobierno ha luchado mucho tiempo por quitar la costumbre de las familias en China, que celebran un funeral con estrípers, las personas lo siguen haciendo debido a que para ellos es una buena acción.
Los pobladores cuentan, que mientras más gente acuda a los funerales, será un mayor honor para el difunto. De ahí la contratación de bailarines exóticos y en poca ropa en esos eventos.
Incluso, en Taiwán se dio un hecho muy llamativo, ya que el año pasado hubo un funeral donde 50 bailarinas de “pole dancing” participaron, haciendo piruetas en el techo de vehículos todoterreno.