Salvar una vida en México puede estar tan sólo a un click de distancia, pues a partir de ayer los 37 millones de usuarios de Facebook en el país podrán activar su estatus como donadores de órganos y podrán compartir la historia de por qué decidieron de hacerlo.
El reto principal ahora en este tema, sin embargo, ya no es tanto fomentar una cultura de donación sino resolver la parte operativa. No hay ni 100 especialistas para la extracción y trasplante de órganos en el país y sólo existen 406 hospitales autorizados a nivel nacional para hacer actividades de donación, procuración y trasplantes.
El resultado es que 20 de cada 100 de la donaciones propuestas se pierden o porque el hospital no tenía las condiciones dadas para obtener los órganos en condiciones de calidad o porque no existía un especialista capacitado.
“El reto es incrementar la actividad de trasplantes en al alrededor de la mitad de los estados de este país, en la mitad de los estados de México hay muy poca capacitación, estructura hospitalaria para hacer actividades de donación, procuración y trasplantes, me refiero a recursos humanos, institucionales, tecnológicos financieros”, reconoció el director del Centro Nacional de Trasplantes de la Secretaría de Salud, Arturo Dib Kuri.
Tras aplaudir la iniciativa del Instituto Carlos Slim de la Salud, Fundación Ale y Facebook para fomentar la cultura de la donación a través de una aplicación de la red social activada ayer de manera oficial por la primera dama Margarita Zavala, Dib Kuri, dijo que en la vida real lo que se necesita resolver es la parte operativa: cuántos murieron, cuántos donaron y cuántos se trasplantaron.
Hoy de acuerdo a las últimas cifras disponibles en el Registro Nacional de Trasplantes, 16 mil 632 personas requieren un órgano: 8 mil 829 un riñón; 7 mil 365 una córnea; 374 un hígado; 38 un corazón, 11 un riñón y un páncreas; seis un páncreas; cinco un pulmón; dos un hígado y un riñón; una un corazón y un pulmón y una más un corazón y un riñón.
El año pasado, según el doctor Dib Kuri, hubo 900 donadores cadavéricos y mil 600 vivos, lo que permitió que se realizaran poco más de 5 mil trasplantes.
