Se aproximan las festividades y en ellas los platillos exquisitos, de los cuales las ensaladas no pueden faltar, sin embargo, puede que la lechuga que estemos comiendo no se encuentre en las mejores condiciones, especialmente si es importada de Estados Unidos.
Se los decimos porque el país vecino se encuentra en una alerta nacional por un nuevo brote de E. coli por culpa de la lechuga romana. Así lo estableció El Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades, que exhortan a las personas a no consumirla porque ya se han registrado tanto en E.U. como en Canadá 50 casos de personas afectadas en ambas naciones.
Por ende, ahorita todo rastro de lechuga romana debe ser desechada, bajo ningún motivo ingerirla e incluso limpiar muy bien los espacios donde fue colocada, como el refirgerador para evitar la propagación de la enfermedad.
Porque la bacteria del E. coli, es altamente peligrosa y se desarrolla principalmente en el intestino delgado, afectando en general a nuestro sistema digestivo y que se sintomatiza por medio de vómitos, diarre, fiebre y que puede provocar la muerte.