Estudian sexualidad de mujeres lesbianas

Los sexólogos que han investigado la sexualidad de la mujer lesbiana en estos últimos años van encontrando razones para desbancar ciertos estereotipos trasnochados que, sin embargo, persisten. Por ejemplo, hace ya tres décadas, Pepper Schwartz, sociólogo de la Universidad de Chicago, concluyó que las mujeres lesbianas se masturban menos que las heterosexuales, practican sexo con menor frecuencia y su abanico de posturas es más aburrido.

Enseguida, la feminista Marilyn Frye le rebatió con un dato aplastante: una sesión de sexo con una mujer lesbiana dura aproximadamente media hora. El 85% de las parejas heterosexuales lo zanja en apenas ocho minutos. Y de acuerdo con una encuesta australiana en la que participaron más de 19 mil personas, las mujeres lesbianas son mejores amantes y disfrutan de más orgasmos. El porcentaje de mujeres que alcanza el clímax es del 69% si son heterosexuales y del 76% si son lesbianas.

¿Por qué se dan, entonces, datos tan contradictorios? Beatriz Gimeno encuentra una explicación muy sencilla: “La cantidad de sexo o deseo que se considera normal está medida casi siempre por estándares masculinos”.

La socióloga chilena Luz María Figueroa ha tardado más de cinco años en componer su estudio Mujeres lesbianas. Rastreó en bibliotecas, librerías, instituciones, etcétera. Y el resultado era casi siempre el mismo: no encontraba ni una sola palabra de lesbianismo y sí sobre la homosexualidad masculina. Su conclusión es que la mujer lesbiana es invisible en la mayoría de las sociedades.

De todos modos, la forma de practicar sexo de las lesbianas no esconde mayor enigma. “La sexualidad entre dos mujeres”, explica Aída Castaño, “no dista necesariamente de las relaciones heterosexuales u homosexuales masculinas. Depende mucho más de las personas que conforman una pareja y su manera de vivir la sexualidad que de su género”.

Otra cosa es encontrar pareja. A la espera de que se invente un “radar lésbico” que ayude en la búsqueda, parece que hay ciertas dificultades añadidas a la hora de ligar. ¿Cómo saber si una mujer “entiende” o no? No todas las lesbianas son tan visibles como la cantante de rock Melissa Etheridge. Según la revista MiraLes, lo más habitual es conocerse por medio de amigas comunes, en locales de ambiente y por internet, si bien en la red abundan heterocuriosas con el único afán de probar experiencias nuevas y también mujeres que no se deciden a salir del armario y viven su homosexualidad bajo el anonimato del sexo virtual.

Si hace unos años la lesbiana parecía ir pegada a un kit lésbico (pelo rapado, camisa a cuadros y andares masculinos), el desconcierto ahora es aún mayor con la tendencia lesbian chic, la androginia llevada al extremo o el juego de la ambigüedad. Puesto que ha resultado un producto cultural muy vendible, se han adscrito a él mujeres de cualquier pelaje sexual. “Son muchas las famosas que se apuntan al carro de llamar la atención besando a otra mujer, pero dejando claro que son heterosexuales. 

 

Fuente: Quo