Veterinarios de la Universidad de Edimburgo extirparon con éxito la enorme lengua de 3 kilos que tenía un oso tibetano.
La cirugía para este animal fue necesaria para mejorar su calidad de vida, ya que cuentan sus cuidadores que incluso para jugar, este oso arrastraba su enorme lengua, poniéndolo en peligro de clavarse un objeto filoso.
Gracias a esta operación, “Nyan Htoo” se alimenta de manera mucho más confortable, duerme en una posición más cómoda y se mueve sin necesidad de arrastrar la lengua.
