Emilio Lozoya, director general de Petróleos Mexicanos (Pemex), aclaró que fue una falsa alarma la que se generó al interior de las instalaciones de Pemex, lo que provocó que algunos de los trabajadores decidieran salir de las oficinas después de las 12:20 horas.
“Una bolsa de comida podrida y la gente se asustó, no pasó absolutamente nada, las instalaciones han sido revisadas en su totalidad y no hay riesgo de trabajo porque ya estaba corriendo la información de manera incorrecta en los medios”, dijo Lozoya en entrevista con algunos reporteros que se encuentran haciendo un recorrido dentro del complejo de Pemex ubicado en Marina Nacional.
No obstante, los encargados de Comunicación Social no precisaron si alguna autoridad ordenó la salida de los trabajadores, ni tampoco dónde se encontraba la bolsa de comida podrida que generó el pánico entre las personas.
Aproximadamente a las 12:40 horas, el personal, que salió por la puerta número 22, ubicada en Bahía de San Hipólito, ingresó nuevamente a su lugar de trabajo.
