La actriz británica y su colega, Amanda Seyfried, han sido víctimas de un hackeo que dejó a la luz fotos privadas y con fuerte contenido sexual, por lo que ambas anunciaron que iniciarán acciones legales.
Las imágenes de Watson son de distintas pruebas de ropa, algunas de ellas en bikini, y entre el material robado por los hackers hay un video casero en el que -presuntamente- la estrella inglesa aparece completamente desnuda en una tina, a pesar de que su rostro permanece oculto en todo momento. Al ser consultada, Watson dijo que “sabía que era una broma ya que esas imágenes no existían”.
En el caso de Seyfried -quien está embarazada de su primer hijo- las fotos son mucho más explícitas, ya que en ellas aparece en la cama o en la ducha, así como practicando sexo oral. El abogado de la actriz envió una carta al sitio Celeb Jihad, exigiendo que retiren de inmediato las imágenes privadas de la estrella que fueron obtenidas ilegalmente y publicadas sin el consentimiento de la intérprete de Mamma Mía.
Con información de infobae
