Dicen por ahí que los perros y los gatos mantienen una enemistad histórica, aunque en ocasiones las reglas se rompen en el mundo animal y surgen grandes amistades entre estas dos especies. Tal es el caso de una peculiar manada de huskies siberianos que han adoptado a un pequeño gato y este ha comenzado a actuar como perro.
Lilo, Infinity y Miko han estrechado sus lazos desde que la gata “Rosie” llegó a sus vidas. De acuerdo con la propietaria, Lilo, una de las huskies, fue quien adoptó a la gatita que fue rescatada de las calles y desde entonces son grandes amigos. “Cuando la encontramos tenía solo tres semanas y estaba desnutrida, letárgica y moribunda”, indicó Thoa Bui a ABC News. La pequeña Rosie llegó deprimida de las calles en San José California, así que la propietaria la dejó acurrucarse con Lilo, y rápidamente se convirtió en madre sustituta, y aunque nunca había tenido cachorros amamantó a la gata. Rosie comenzó a seguir a los perros a todas partes y a imitar sus gestos caninos, era tan pequeña que los perros se convirtieron en sus guías.
Desde entonces los miembros de la manada hacen todo juntos, comen del mismo plato, van de paseo y duermen en el mismo sitio.