En el contacto diario, el felino se dio cuenta que maullar no le era suficiente para atraer la atención de su dueño.
Así que mediante el contacto físico y unas señas que hace con sus patitas, muy cerca de su boca, pide alimento y causa sorpresa a quienes lo miran.
Así demostró que el lenguaje es universal entre razas y que contrario a lo que algunos piensan, los gatos también pueden recibir adiestramiento, pese a la independencia que les caracteriza,
¿Conoces otro gato que haga cosas similares?
Fuente: TV Notas