¿Ha cambiado el aspecto del cometa ISON o es la fotografía?

La luz del cometa se debe a varias causas: por un lado, vemos la luz solar reflejada en los minúsculos granos de polvo, algo que los científicos denominan como “continuum”.

Por otro lado, también vemos la luz emitida por las moléculas cuando “chocan” con la radiación ultravioleta.

Lo que observamos, en realidad, es solo aquella región visible del espectro electromagnético, situada en una longitud de onda de 380 a 780 nm.

En este segundo caso, los investigadores estudian qué moléculas son las que precisamente hacen que veamos estos raros colores.

Y los responsables son gases como el cianógeno o el carbono diatómico y triatómico, que provocan los picos más altos en el espectro de la radiación que nos llega del cometa, como podemos observar en la imagen de la izquierda.

Estos gases son los responsables del color verdoso que se observa en algunas imágenes del cometa ISON. Aplicando diferentes filtros de fotografía en las cámaras también podemos diferenciar qué tipo de estudio queremos realizar sobre ISON, como explican los astrónomos.

Sea como fuere, lo cierto es que son muchos los que siguen anotando la fecha del 28 de noviembre en sus calendarios. Ese día veremos si finalmente el cometa ISON cumple las expectativas generadas.

luz