En 1961 un avión que trasladaba a uno de los equipos más célebres de Chile, el Green Cross, se estrelló en Los Andes el 3 de abril de 1961, con 24 personas abordo, entre ellas técnicos y jugadores.
Después de 53 años, por un hallazgo fortuito, un grupo de excursionistas encontró los restos del avión a tres mil 200 metros de altura, en un punto de la cordillera de Los Andes, ubicado a 360 kilómetros de la capital, Santiago.
Los montañistas aseguraron que en el lugar había partes del fuselaje y restos óseos.