De acuerdo con el grupo informático Anonymous, el sacerdote José Ataulfo García fue absuelto por la Arquidiócesis Primada de México, incluso después de haber confesado que abusó sexualmente de al menos 30 niñas indígenas en Oaxaca, aún cuando sabía que estaba contagiado con el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH).
Luego de que los padres de un par de menores interpusieron una denuncia en su contra, el sacerdote aceptó haber violado a decenas de niñas de entre cinco y 10 años de edad, ya sabiendo que es portador del VIH.
La madre de una de las víctimas intentó hacer llegar este caso al Vaticano, pero sólo consiguió que fuera revisado por la Arquidiócesis de México.
Ataulfo García fue investigado durante tres meses por la Sagrada Congregación para la Doctrina de la Fe de México, y al concluir las indagaciones declararon que “está libre de cualquier acusación”.
No es la primera vez que se denuncia a algún miembro de la Iglesia católica mexicana por pederastia por parte de asociaciones civiles o padres de familia, sin embargo, cada vez que esto sucede, las autoridades no intervienen y los responsables no son juzgados.
José Ataulfo García se convirtió en parte de una larga lista de sacerdotes pederastas en México, en donde también aparece el nombre de Gerardo Silvestre Hernández, quien fue detenido por abusar de un niño zapoteca en 2013, caso que descubrió cientos de abusos cometidos por el religioso.
También, durante el mes de julio, Carlos Franco Pérez, fue acusado por Lenin López, un joven de 19 años que denunció haber sido violado dos meses atrás, pero otra vez, el clérigo resultó inocente por falta de pruebas.
