Llega el invierno y con él, el temido virus de la Influenza, en sus 3 tipos: A, B y C. Cada uno de estos tipos tiene sus propias cepas, por lo que el virus es distinto cada año.
Por eso, todos los años hay que recibir la vacuna actualizada, especialmente los grupos más vulnerables (niños, adultos mayores, mujeres embarazadas). Además, hay que tomar precauciones extra, pues la Influenza se contagia muy fácilmente, por medio de gotitas de saliva que expulsamos al hablar o estornudar.
El problema con esta enfermedad es que, aunque su duración es de aproximadamente una semana, puede repetirse varias veces, debido a la mutación del virus.
Los efectos secundarios de la vacuna son muy leves: dolor, inflamación en donde se aplicó la vacuna, y fiebre ligera que puede ser tratada con paracetamol. Es importante tomar en cuenta que la vacuna no hace efecto hasta 15 días después de aplicada.
Y si eres alérgico al huevo… no se te ocurra aplicarte la vacuna.
Fuente: EsMas
