Después de la catástrofe que padeció Japón, se avecina un problema más entre los que ya embargan a ese país, que será la falta de suministro eléctrico para verano, por lo que planean crear centrales generadoras de energía que se alimenten con la madera resultante de los escombros.
Se calcula que en el área del desastre hay entre 20 y 30 millones de toneladas, de las cuales 5 millones son madera, ya que la mayoría de las casas de las provincias estaban construidas con ese material.
Las complicaciones siguen acumulándose en Japón; primero fueron las muertes y ahora son los escombros que dejó a su paso el tsunami; aunado a esto, los voluntarios que se encargaban de recoger la basura ya dejaron de cooperar con el Gobierno. Esto deja un hueco enorme en el intento de reconstrucción del país.
Por lo anterior, el gobierno japonés ha decidido “matar dos pájaros de un tiro”: primero aprovechar y desechar toda la madera resultante de la catástrofe; después, generar energía, resultante de la madera, que provea a cerca de 15 mil familias. Esto se logrará con la construcción de 5 plantas de energía, de las cuales, cada una proporcionará suministro a 3 mil hogares. Cuando la madera de los escombros se termine, se seguirán alimentando gracias a la explotación de los bosques.
La urgencia de buscar nuevas fuentes para producir energía se debe a que varias centrales nucleares serán apagadas para hacer inspecciones necesarias.
Fuente: Excelsior
Foto: ABC
