Joven inyectado con VIH por su padre busca que su progenitor continúe en la cárcel #Fotos

Brryan Jackson se presentó en el Departamento de Cárceles de Missouri acompañado de su madre para asegurarse que su padre continúe en prisión como desde hace un par de años.

Brryan, quien agregó una “R” a su nombre para diferenciarse de su papá -Bryan-, denunció a su progenitor por haberlo inyectado con el virus del VIH cuando era sólo un bebé.

La historia del joven fue difundida por la BBC de Londres. El padre del ahora joven de 24 años, fue amoroso con él los primeros días de su vida, sin embargo, después de participar en la operación “Tormenta del Desierto” (Guerra del Golfo); volvió a casa muy cambiado y realizó una acción que afectaría la salud de su hijo de por vida.

Brian Stewart inyectó sangre infectada con VIH a su hijo en el año 1992, cuando éste tenía tan sólo 11 meses de edad.

Al regresar del servicio, el padre desconoció a su hijo y comenzó a exigirle pruebas de ADN a Jennifer Jackson. Al mismo tiempo que hacía esto, el sujeto amenazaba a la madre diciéndole que su hijo no viviría mucho tiempo. El joven, ahora, cree que su papá le hizo eso para acabar con él y evitar la manutención.

Cuando el padre volvió de la guerra comenzó a trabajar en un laboratorio. Según la investigación, fue entonces que comenzó a guardar muestras de sangre infectadas, entre ellas con Virus de Inmunodeficiencia Humana, causante del SIDA.

Aunque los padres estaban separados y el Brian no se hacía cargo de su hijo, la madre decidió llamarlo en una ocasión por que Brryan enfermó. Estando en el hospital, el hombre aprovechó un momento en el que se quedó a solas con el pequeño para inyectarlo con la sangre infectada.

Además de contaminada, la sangre no era del tipo de su hijo, por lo que la reacción fue inmediata. El terrible diagnóstico llegaría hasta cuatro años después de ese momento.

“Cuando llegaron los resultados, me diagnosticaron SIDA completamente desarrollado y tres infecciones. Los médicos llegaron a la conclusión de que era imposible que sobreviviese. Me dieron 5 meses de vida y me enviaron a casa”.

A pesar de que los médicos tenían pocas esperanzas de que el pequeño sobreviviría, hoy Brryan es un joven adulto que fue capaz de enfrentar a su padre para que este fuera a prisión. Ahora, el hijo continúa su lucha para asegurarse que su progenitor continúe durante años tras las rejas.

En su defensa, el padre alega que sufrió estrés postraumático después de su periodo en Arabia Saudita. Pero Jackson no le cree, ya que asegura que sirvió en la reservas navales y nunca llegó a entrar en combate.

“No se limitó a tratar de matarme, cambió mi vida para siempre. Fue el responsable de la intimidación, fue responsable de todos los años en un hospital. Él es la razón que tengo que ser tan consciente de mi salud y de lo que hago”.

BRRYAN JACKSON

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Con información de 24 Horas, BBC y Playground