Luego de que una fotografía de la princesa Letizia fuera noticia en todo el mundo porque aparece extremadamente delgada, un colaborador del diario español más importante, “El País”, salió a su defensa, aunque aclara que “no hay duda de que a la retratada no le sobran precisamente kilos”.
El periodista asegura que la princesa “debe ser asidua al gimnasio y ha errado en su vestuario“, pero que según análisis detallado de la imagen se trata de “un doble efecto óptico” por el cual su brazo izquierdo se ve mucho más delgado de lo que realmente es.
Ramón Peco, colaborador de S Moda -una revista encartada en El País- asegura que dos factores influyen para que el brazo de Letizia se vea “de forma artificial“.
El primero es que como la foto ha sido realizada con un teleobjetivo, probablemente desde muy larga distancia, la imagen pierde profundidad. Se produce el clásico aplanamiento que es propio de las fotos disparadas con esa clase de lentes. Por eso vemos que desde la mano hasta el codo el brazo aparece en escorzo, proyectado de forma poco natural.
“Si empleamos una lente que nos acerque aún más a la persona -como hacen los paparazzi- lo que obtenemos es un representación desnaturalizada, como sucede en el presente caso”, afirma.
El segundo factor, sostiene Peco, es la iluminación del lugar en el que se ha hecho la foto, pues se produce un fuerte contraste entre las zonas de luz y sombra. “Debido a eso vemos oscura y disimulada parte de la zona de los biceps, lo que reduce el volumen del brazo. Además el efecto de claroscuro potencia el relieve de la musculatura. Una técnica muy usada a la hora de iluminar esculturas para resaltar sus relieves”.
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