En un KFC de Jackson, Mississippi, una niña fue objeto de discriminación al pedirle a su familia que la retirarna debido a su apariencia.
Los empleados argumentaron que la hija de tres años de la familia incomodaba a los clientes del establecimiento.
Victoria Wilcher perdió su ojo derecho cuando tres perros pitbulls la mordieron en abril pasado , además de sufrir diversas heridas en la cara.
La cadena de pollos fritos informaron que se encuentran investigando el caso “muy seriamente”, además de comprometerse a actuar de forma “apropiada”.