Kristina Pimenova ha revolucionado el mundo proclamándose la niña más guapa del ídem y que ya ha echado un ojo a los primeros contratos que se le han puesto sobre la mesa.
Las agencias de modelos quieren carne fresca y haciendo gala de la falta de escrúpulos de la que siempre se han vanagloriado han corrido a atraer a la jovencísima ‘modelo’ que lleva apuntada a una agencia desde los tres años. Y es que su padre, un futbolista retirado ruso, y su madre, exmodelo de profesión, no quisieron dejar pasar los enormes ojos azules de la niña y decidieron su profesión cuando apenas podía caminar.
Y la polémica ha llegado a la misma velocidad que la noticia de esta niña que ha trabajado ya para Roberto Cavalli o Dolce & Gabanna. La menor tiene cuentas en Instagram, Facebook y Twitter, todas ellas gestionadas por su propia madre quien es a su vez su representante.
