Un estudio de la Universidad de Greenwich, Inglaterra, se llevó a cabo para descubrir las propiedades analgésicas del alcohol y los resultados encontraron que la cerveza puede ser más efectivo que una pastilla para el dolor de cabeza.
“Ingerir dos cervezas al día puede reducir el dolor de cabeza y otros malestares físicos, debido a que el alcohol aumenta la dosis en sangre en un 0.08%, lo que significa que el umbral del dolor se incrementa”.
La cerveza afecta los receptores del dolor, por lo que se vuelve muy común beberla después de un día pesado en el trabajo.
Los expertos advirtieron que la medida es importante al beber, ya que más de 500 mililitros al día, que es lo recomendado, puede derivar en otros malestares al día siguiente: la temida cruda.