La “Tía Toña” era una mujer solitaria y con dinero, sin ninguna familia con quien compartir su fortuna. Vivía en una gran casa ubicada en la tercera sección del Bosque de Chapultepec.
Ella decidió dar cobijo en su casa a los niños de la calle, proporcionándoles techo, ropa y comida, no se sabe con precisión a cuántos.
Convirtió su casa en el hogar que todos estos niños tanto necesitaban, pero con el tiempo los jóvenes le hicieron la vida imposible.
La leyenda dice que Toña perdió la paciencia, y arremetió contra ellos a golpes, hasta dejarlos sin vida, para después deshacerse de los cuerpos arrojándolos a un río cercano.
Las siguientes semanas vivió atormentada, se encerró en su habitación de la cual no se le vio salir jamás.
Ahora se dice que el fantasma de la mujer ronda el inmueble, tomando una actitud hostil hacia cualquiera que se acerque, arrojando cosas desde lo alto, mientras vigila desde la ventana tratando de alejar a los curiosos.
Los transeúntes aseguran ver su silueta en las ventanas, algunos dicen que al pasar enfrente de la casa sienten una enorme presión sobre los hombros, acompañada de una fuerte sensación de ser visto fijamente.
¿Te atreverías a entrar?
